Es el primer año de cole de mi hijo y en la reunión del
primer trimestre, me gustó mucho que su profesora nos propusiera ir a clase
para ofrecer a las niñas y niños alguna actividad que se nos dé bien. A mí me
encanta poder estar un ratito con mi hijo, compartiendo el espacio donde pasa
muchas horas cada día y conocer a sus compis, que son geniales. Además, me
apasiona contar cuentos y cantar y jugar con ellos, así que hablé con Rosa Ana
y me fui un jueves por la tarde con el cuento del Cocodrilo debajo del brazo.
Es un cuento estupendo, sencillo, pero podemos trabajar varias cosas, entre
ellas los colores. Estuvieron súper atentos y al final se partieron de risa.
Mirad, la canción que acompaña al cuento va diciendo así:
VERDE, VERDE, VERDE
EL COCODRILO QUE MUERDE
SE SUBE EN UN BAÚL
AZUL, AZUL, AZUL
Y EL BAÚL EN UN CASTILLO
AMARILLO, AMARILLO, AMARILLO
Y EL CASTILLO EN UNA PIEDRA
NEGRA, NEGRA, NEGRA
Y LA
PIEDRA EN UN TEJADO
MORADO, MORADO, MORADO
Y EL TEJADO EN UNA GRANJA
NARANJA, NARANJA, NARANJA
Y LA GRANJA
(el tejado, la piedra, el castillo, el baúl y el cocodrilo…)
EN UN PIOJO
ROJO, ROJO, ROJO
Y SI LE QUITO EL ROJO
SÓLO ME QUEDA EL PIOJO
Y SI LE QUITO EL NARANJA
SÓLO ME QUEDA LA
GRANJA
(…)
Y SI LE QUITO EL VERDE
SÓLO ME QUEDA…
¡EL COCODRILO QUE MUERDE!
Después cantamos la canción de
UN DÍA NOÉ A LA
SELVA FUE
PUSO A LOS ANIMALES ALREDEDOR DE ÉL
EL CIELO ESTÁ NUBLADO
EL DILUVIO VA A CAER
PERO NO OS PREOCUPÉIS
PORQUE YO OS AYUDARÉ…
ESTANDO EL COCODRILO Y EL ORANGUTÁN
LAS PEQUEÑAS SERPIENTES Y EL ÁGUILA REAL
EL BÚHO, EL TOPO, EL ELEFANTE
NO FALTA NINGUNO
TAN SÓLO NO SE VEN A LOS DOS TICOS
Iban haciendo los gestos y después nos movimos por la clase
como si fuéramos estos animales, para terminar relajándonos con unas respiraciones
muy especiales. Los nenes participaron un montón y se lo pasaron bomba. A
Samuel le hizo mucha ilusión que su mamá fuera a clase y ¡ya me está diciendo
que vaya a contar otro cuento!
Os animo a que os acerquéis a la clase a disfrutar con
vuestros hijos y sus compañerxs, ¡es una experiencia sin igual!
¿Queréis saber qué respiraciones hicimos? Se llama “Atrapar
nubes” y me la contó un papá hace tiempo. Al inspirar subimos los bracitos y
los estiramos bien como si quisiéramos alcanzar una nube y a continuación
soltamos el aire soplando y vamos bajando los bracitos, trayendo la nube hasta
el suelo. Espero que nos pueda servir de ayuda en algunos momentos de tensión.
¡Besos!
Cristina Arana
